Cirugía de espalda: ¿cuándo es una buena idea?

Si bien la cirugía puede aliviar algunas de las causas del dolor de espalda, no suele ser necesaria. En general, el dolor de espalda mejora por sí solo en tres meses.

La lumbalgia, que es el dolor en la parte baja de la espalda, es una de las razones más comunes por las que las personas consultan a un proveedor de atención médica. Los tratamientos frecuentes pueden incluir medicamentos antiinflamatorios, aplicación de calor o de hielo y fisioterapia.

¿Necesitas una cirugía de espalda?

La cirugía de espalda podría ser una opción si otros tratamientos no han resultado eficaces y el dolor es incapacitante.

Muchas personas con dolor de espalda también sienten dolor en una pierna. En general, estos síntomas se deben a la presencia de nervios pinzados en la columna vertebral. Los nervios pueden pinzarse por diversos motivos, como los siguientes:

• Problemas de discos. Los discos son los amortiguadores de textura gomosa que separan los huesos de la columna vertebral. En ocasiones, la hernia de disco se encuentra demasiado cerca de un nervio raquídeo, lo que causa dolor y afecta la función del nervio.
• Crecimiento óseo excesivo. La osteoartritis puede derivar en crecimientos óseos (también llamados espolones óseos) en la columna vertebral. Este exceso de hueso puede reducir el espacio disponible para que los nervios atraviesen las aberturas que hay en la columna vertebral.

La cirugía de espalda alivia este dolor de piernas mejor que el de espalda. Muchas personas que se someten a este tipo de cirugía siguen teniendo dolor de espalda.

Puede ser muy difícil precisar la causa exacta del dolor de espalda, aunque se observen problemas en los discos o espolones óseos en las pruebas por imágenes. En ocasiones, en las pruebas por imágenes que se realizan por otros motivos pueden observarse hernias de disco que no causan síntomas ni requieren tratamiento.

Tipos de cirugía de espalda

Entre los diferentes tipos de cirugía de espalda se incluyen los siguientes:

• Discectomía. Este procedimiento consiste en extirpar la parte herniada del disco.
• Laminectomía. Este procedimiento consiste en extirpar el hueso en la parte posterior de la columna vertebral a fin de hacer más espacio para la médula espinal y los nervios raquídeos.
• Fusión. La fusión espinal implica extirpar las articulaciones artríticas y usar implantes metálicos para conectar dos o más huesos de la columna vertebral de manera permanente.
• Discos artificiales. Estos dispositivos están hechos de plástico y metal. Se usan para reemplazar los amortiguadores dañados entre dos huesos de la columna vertebral.

Considera todas las opciones

Antes de aceptar someterte a una cirugía de espalda, piensa en la posibilidad de obtener una segunda opinión de un especialista calificado. El dolor de espalda y de pierna puede ser un asunto complejo que podría requerir un equipo de profesionales de la salud para su diagnóstico y tratamiento.