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Linfedema

Los ganglios linfáticos dañados o extirpados pueden afectar el drenaje del líquido linfático. La acumulación de líquido deriva en hinchazón. Los tratamientos incluyen compresión y masajes.

Perspectiva general

El linfedema se refiere a la inflamación de los tejidos causada por una acumulación de líquido rico en proteínas que generalmente se drena a través del sistema linfático del cuerpo. Afecta con mayor frecuencia los brazos o las piernas, pero también puede ocurrir en la pared torácica, el abdomen, el cuello y los genitales.

Los ganglios linfáticos son una parte importante de tu sistema linfático. El linfedema puede provocarse por tratamientos contra el cáncer que extirpan o dañan los ganglios linfáticos. Cualquier tipo de problema que bloquee el drenaje del líquido linfático puede causar linfedema.

Los casos graves de linfedema pueden afectar la capacidad de mover la extremidad afectada, aumentar los riesgos de infecciones cutáneas y de septicemia, y pueden provocar cambios y degradación de la piel. El tratamiento puede incluir vendajes de compresión, masajes, medias de compresión, bombeo neumático secuencial, cuidado minucioso de la piel y, en raras ocasiones, cirugía para eliminar el tejido inflamado o para crear nuevas vías de drenaje.

Síntomas

Partes del sistema inmunitario

El sistema linfático forma parte del sistema inmunitario del cuerpo, que protege de infecciones y enfermedades. El sistema linfático incluye el bazo, el timo, los ganglios y los canales linfáticos, así como también las amígdalas y las adenoides.

Una persona con linfedema de pierna

El linfedema es la hinchazón en un brazo o una pierna. En circunstancias excepcionales, afecta a los dos brazos o las dos piernas. También puede afectar a la pared torácica y el abdomen.

Los signos y síntomas del linfedema incluyen los siguientes:

  • Hinchazón de la totalidad o parte del brazo o la pierna, incluso los dedos de los pies y de las manos
  • Sensación de pesadez u opresión
  • Amplitud limitada de movimiento
  • Infecciones recurrentes
  • Endurecimiento y engrosamiento de la piel (fibrosis)

Los signos y síntomas pueden variar de leves a graves. Es posible que el linfedema producido por el tratamiento contra el cáncer no aparezca hasta meses o años después de haber recibido el tratamiento.

Cuándo debes consultar a un médico

Pide una cita médica con el médico si notas una hinchazón persistente en los brazos o las piernas. Si ya te diagnosticaron un linfedema, acude al médico si se produce un aumento repentino y drástico del tamaño de la extremidad afectada.

Causas

El sistema linfático es una red de vasos que transportan líquido linfático rico en proteínas por todo el cuerpo. Es parte del sistema inmunitario. Los ganglios linfáticos actúan como filtros y contienen células que combaten las infecciones y el cáncer.

El líquido linfático se impulsa a través de los vasos linfáticos por las contracciones musculares al moverte durante el día y a través de pequeñas bombas en la pared de los vasos linfáticos. El linfedema ocurre cuando los vasos linfáticos no pueden drenar de manera adecuada el líquido linfático, generalmente de un brazo o de una pierna.

Las causas más comunes del linfedema son:

  • Cáncer. Si las células cancerosas bloquean los vasos linfáticos, puede producirse un linfedema. Por ejemplo, un tumor que crece cerca de un ganglio linfático o de un vaso linfático puede aumentar de tamaño hasta llegar a bloquear el flujo de líquido linfático.
  • Tratamiento de radiación para el cáncer. La radiación puede provocar el proceso de cicatrización y la inflamación de los ganglios linfáticos o de los vasos linfáticos.
  • Cirugía. En la cirugía contra el cáncer, se suelen extirpar los ganglios linfáticos para determinar si la enfermedad se ha diseminado. Sin embargo, esto no siempre da lugar a un linfedema.
  • Parásitos. En los países en desarrollo del trópico, la causa más común de linfedema es la infección por gusanos que parecen hilos que obstruyen los ganglios linfáticos.

Con menor frecuencia, el linfedema se debe a afecciones hereditarias en las que el sistema linfático no se desarrolla de manera adecuada.

Factores de riesgo

Los factores que pueden aumentar el riesgo de desarrollar linfedema incluyen los siguientes:

  • Edad avanzada
  • Sobrepeso u obesidad
  • Artritis reumatoide o psoriásica

Complicaciones

Las complicaciones del linfedema pueden incluir:

  • Infecciones de la piel (celulitis). El líquido atrapado genera un terreno favorable para el desarrollo de los gérmenes, y la mínimalesión en el brazo o la pierna puede ser un punto de entrada para la infección. La piel afectada tiene un aspecto inflamado y rojo, y suele causar dolor al tocarla y notarse caliente.Tu médico puede recetarte antibióticos para que los tengas a mano y puedas comenzar a tomarlos de inmediato.
  • Septicemia. La celulitis no tratada puede extenderse al torrente sanguíneo y desencadenar septicemia, una afección que pone en riesgo la vida y que ocurre cuando la respuesta del cuerpo a una infección provoca daños en sus propios tejidos. La septicemia requiere tratamiento médico de emergencia.
  • Drenaje a través de la piel. Con una hinchazón grave, el líquido linfático puede drenar a través de pequeñas roturas en la piel o causar ampollas.
  • Cambios en la piel. En algunas personas con linfedema muy grave, la piel de la extremidad afectada puede engrosarse y endurecerse y adquirir el aspecto de la piel de un elefante.
  • Cáncer. Una forma poco frecuente de cáncer de tejido blando puede desarrollarse como consecuencia de los casos más graves de linfedema que no reciben tratamiento.

Diagnóstico

Si tienes riesgo de sufrir linfedema, por ejemplo, si recientemente te sometiste a una cirugía para el cáncer que afecta a los ganglios linfáticos, el médico puede diagnosticarte linfedema en función de los signos y síntomas.

Si la causa del linfedema no es tan evidente, el médico puede pedir pruebas por imágenes para examinar el sistema linfático. Entre las pruebas se pueden incluir las siguientes:

  • Imágenes por resonancia magnética. La resonancia magnética utiliza un campo magnético y ondas de radio para producir imágenes 3D de alta resolución del tejido afectado.
  • Tomografía computarizada. Esta técnica de rayos X genera imágenes transversales detalladas de las estructuras del cuerpo. Las tomografías computarizadas pueden revelar obstrucciones en el sistema linfático.
  • Ecografía. Esta prueba utiliza ondas sonoras para producir imágenes de las estructuras internas. Puede ayudar a encontrar obstrucciones en el sistema linfático y el sistema vascular.
  • Linfoscintigrafía. Durante esta prueba, se inyecta un tinte radiactivo y, luego, una máquina realiza una exploración. Las imágenes que se obtienen muestran el tinte en movimiento a través de los vasos linfáticos lo que permite resaltar las obstrucciones.

Tratamiento

El linfedema no tiene cura. El tratamiento se centra en disminuir la hinchazón e impedir el desarrollo de complicaciones.

Medicamentos

El linfedema aumenta considerablemente el riesgo de infecciones cutáneas (celulitis). Tu médico puede recetarte antibióticos para que los tengas a mano y puedas comenzar a tomarlos de inmediato si se presentan los síntomas.

Terapia

Los terapeutas especializados en linfedema pueden darte información sobre las técnicas y los equipos que pueden ayudar a reducir la hinchazón del linfedema. Por ejemplo:

  • Ejercicios. La contracción suave de los músculos del brazo o la pierna puede ayudar a mover el exceso de líquido fuera de la extremidad hinchada.
  • Drenaje linfático manual. Los terapeutas capacitados en esta técnica de masaje utilizan una presión muy ligera para desplazar el líquido atrapado en la extremidad hinchada hacia una zona con vasos linfáticos en funcionamiento. Las personas deben evitar el drenaje linfático manual si tienen una infección en la piel, coágulos de sangre o un cáncer activo en la extremidad afectada.
  • Vendas de compresión. El uso de vendas poco elásticas para envolver toda la extremidad favorece que el líquido linfático vuelva a fluir hacia el tronco del cuerpo.
  • Prendas de compresión. Las mangas o medias elásticas ajustadas pueden comprimir el brazo o la pierna para favorecer el drenaje del líquido linfático. Estas prendas suelen requerir una receta médica para garantizar que se utiliza el grado de compresión adecuado. Es posible que un profesional deba medirte para garantizar un ajuste adecuado.
  • Compresión neumática secuencial. Una manga que se coloca sobre el brazo o la pierna afectados se conecta a una bomba que la infla de forma intermitente, con lo que ejerce presión sobre la extremidad y aleja el líquido linfático de los dedos de las manos o de los pies.
    • Cirugías y otros procedimientos

      Los tratamientos no quirúrgicos para la linfedema pueden incluir:

      • Trasplante de ganglio linfático. Los ganglios linfáticos se extraen de una zona diferente del cuerpo y se unen a la red de vasos linfáticos de la extremidad afectada. Muchas personas con linfedema en estadio temprano obtienen buenos resultados con esta cirugía y pueden disminuir la cantidad de compresión necesaria.
      • Nuevas vías de secreción. Otra opción para el linfedema en estadio temprano, este procedimiento crea nuevas conexiones entre la red linfática y los vasos sanguíneos. El exceso de líquido linfático se elimina de la extremidad a través de los vasos sanguíneos.
      • Extirpación del tejido fibroso. En el linfedema grave, los tejidos blandos de la extremidad se vuelven fibrosos y se endurecen. La eliminación de parte de este tejido endurecido, generalmente mediante liposucción, puede mejorar el funcionamiento de la extremidad. En casos muy graves, el tejido y la piel endurecidos pueden eliminarse con un bisturí.

Estilo de vida y remedios caseros

Para reducir el riesgo de complicaciones derivadas del linfedema, evita lesionarte la extremidad afectada. Los cortes, las raspaduras y las quemaduras pueden promover las infecciones. Protégete de los objetos punzantes o cortantes. Por ejemplo, aféitate con una afeitadora eléctrica, usa guantes cuando hagas tareas de jardinería o para cocinar, y usa dedales para coser.

Estrategias de afrontamiento, y apoyo

Saber que no existe una cura para el linfedema puede ser frustrante. Sin embargo, puedes controlar algunos aspectos del linfedema. Para ayudarte a afrontarlo, intenta lo siguiente:

  • Averigua todo lo que puedas sobre el linfedema. Saber de qué se trata el linfedema y qué lo provoca puede facilitar la comunicación con el médico o el fisioterapeuta.
  • Cuida la extremidad afectada. Limpia la piel todos los días, observando cada centímetro de la extremidad afectada en busca de posibles problemas, como grietas o cortes. Aplica una loción para prevenir la piel seca.
  • Cuida todo el cuerpo. Sigue una dieta con abundantes frutas y verduras. Si puedes, haz ejercicio todos los días. Reduce el estrés. Trata de dormir lo suficiente. Ocuparte de tu cuerpo te da más energía y favorece la recuperación.
  • Busca apoyo de otras personas con linfedema. Ya sea que asistas a reuniones de un grupo de apoyo en tu comunidad o que participes en foros de mensajes por Internet, te ayudará hablar con personas que se enfrentan a dificultades similares.

Preparación antes de la cita

A continuación, encontrarás información que te ayudará a prepararte para la cita con el médico.

Qué puedes hacer

Haz una lista de lo siguiente:

  • Los síntomas, incluso los que parezcan no estar relacionados con el motivo por el que pediste la cita médica
  • La información personal más importante, incluso las enfermedades o traumas importantes, tratamientos para el cáncer o cambios recientes en tu vida
  • Medicamentos, vitaminas y suplementos que tomas
  • Preguntas para hacerle al médico

En cuanto al linfedema, estas son algunas preguntas básicas para hacerle al médico:

  • ¿Cuál es la causa más probable de esta hinchazón?
  • ¿Puede haber otra causa?
  • ¿Qué pruebas necesito hacerme? ¿Estos análisis requieren alguna preparación especial?
  • ¿Esta hinchazón es temporal o de larga duración?
  • ¿Cuál es el tratamiento para el linfedema?
  • ¿Hay alternativas al enfoque que sugiere?
  • ¿Existen medicamentos para aliviar la hinchazón?
  • Tengo otras afecciones. ¿Cómo puedo controlarlas de manera conjunta?
  • ¿Tengo que restringir mi dieta o mis actividades?
  • ¿Tiene folletos u otro material impreso que me pueda llevar? ¿Qué sitios web me recomienda?

No dudes en hacer también otras preguntas.

Qué esperar del médico

Es probable que el médico te haga preguntas como las siguientes:

  • ¿Cuándo comenzó la hinchazón?
  • ¿Hubo algo que precediera a la hinchazón, como una cirugía, un traumatismo, una radioterapia o medicamentos nuevos?
  • ¿Tienes otros signos o síntomas?
  • ¿La hinchazón ha sido continua u ocasional?
  • ¿Hay algo que parezca mejorar la hinchazón?
  • ¿Hay algo que parezca empeorar los síntomas?
  • ¿Qué has probado para tratar el edema y cómo ha funcionado?

Qué puedes hacer mientras tanto

Mantén la extremidad hinchada lo más elevada posible y protege la piel de las lesiones. La hinchazón del linfedema puede ser un dolor sordo de una lesión o una quemadura, por lo tanto, no uses almohadillas de calor sobre la extremidad afectada. Hidrata la piel a diario.

Last Updated: November 24th, 2022