Ameloblastoma
Infórmate más sobre los síntomas y el tratamiento de este tumor no canceroso (benigno) poco frecuente que se desarrolla en el hueso maxilar.
Perspectiva general
El ameloblastoma es un tumor no canceroso (benigno) poco frecuente que se desarrolla con mayor frecuencia en la mandíbula, cerca de los molares. El ameloblastoma comienza en las células que forman el revestimiento del esmalte protector de los dientes.
El tipo más común de ameloblastoma es agresivo, ya que forma un gran tumor y crece dentro de la mandíbula. El tratamiento puede incluir cirugía y radiación. En algunos casos, puede ser necesaria una reconstrucción para restaurar los dientes, la mandíbula y el aspecto facial. Algunos tipos de ameloblastoma son menos agresivos.
Aunque el ameloblastoma se diagnostica con mayor frecuencia en adultos de 30 a 60 años, puede presentarse en niños y adultos jóvenes.
Síntomas
El ameloblastoma no suele presentar síntomas, pero los signos y síntomas pueden incluir dolor y un bulto o hinchazón en la mandíbula.
Si no se trata, el tumor puede aumentar mucho de tamaño, lo que deforma la parte inferior de la cara y del hueso maxilar inferior y cambia la posición de los dientes.
Cuándo debes consultar con un médico
Habla con el dentista o el proveedor de atención médica si tienes hinchazón o dolor en la mandíbula o si tienes alguna otra preocupación sobre la salud bucal.
Causas
El ameloblastoma comienza en las células que forman el revestimiento del esmalte protector de los dientes. En raras ocasiones, puede comenzar en el tejido gingival. No está clara la causa exacta del tumor, pero varios cambios genéticos (mutaciones) pueden estar implicados en el desarrollo del ameloblastoma. Estos cambios pueden repercutir en la ubicación del tumor, el tipo de células implicadas y la rapidez de desarrollo del tumor.
Los ameloblastomas generalmente se clasifican según el tipo, pero también se los puede clasificar según el tipo de célula. Los cuatro tipos principales incluyen los siguientes:
- Ameloblastoma convencional. Este es el tipo más común y se desarrolla de forma agresiva, generalmente en el hueso maxilar inferior, y aproximadamente el 10 % reaparece después del tratamiento.
- Ameloblastoma uniquístico. Este tipo es menos agresivo, pero generalmente ocurre a una edad más temprana. El tumor suele estar en la parte trasera del hueso maxilar inferior en los molares. La recurrencia es posible después del tratamiento.
- Ameloblastoma periférico. Este tipo es poco frecuente y afecta las encías y el tejido bucal en el hueso maxilar superior o inferior. El tumor tiene un riesgo bajo de recurrencia después del tratamiento.
- Ameloblastoma metastatizante. Este tipo es muy poco frecuente y consiste en células tumorales que se producen lejos del sitio primario en el hueso maxilar.
Complicaciones
En raras ocasiones, el ameloblastoma puede volverse canceroso (maligno). Muy pocas veces, las células del ameloblastoma pueden diseminarse (hacer metástasis) hacia otras partes del cuerpo, como los ganglios linfáticos en el cuello y los pulmones.
El ameloblastoma puede volver a aparecer después del tratamiento.
Diagnóstico
El diagnóstico de ameloblastoma podría comenzar con pruebas como las siguientes:
- Pruebas por imágenes. Las radiografías, las tomografías computarizadas y las resonancias magnéticas ayudan a los médicos a determinar la extensión de un ameloblastoma. El tumor a veces se puede detectar en radiografías de rutina en el consultorio del dentista.
- Prueba de tejidos. Para confirmar el diagnóstico, los médicos pueden extraer una muestra de tejido o de células y enviarla a un laboratorio para que se la analice.
Tratamiento
El tratamiento del ameloblastoma dependerá del tamaño y de la ubicación del tumor, y del tipo y de la apariencia de las células implicadas. El tratamiento puede incluir lo siguiente:
- Cirugía para extirpar el tumor. En general, el tratamiento del ameloblastoma incluye cirugía para extirpar el tumor. El ameloblastoma a menudo crece hacia el hueso maxilar cercano, por lo que es posible que los cirujanos tengan que extirpar la parte afectada del hueso maxilar. Un enfoque agresivo de la cirugía reduce el riesgo de que el ameloblastoma vuelva a aparecer.
- Cirugía para reparar la el hueso maxilar. Si la cirugía implica la extirpación de parte del hueso maxilar, los cirujanos pueden repararlo y reconstruirlo. Esto puede ayudar a mejorar el aspecto y el funcionamiento del hueso maxilar luego del procedimiento. La cirugía también puede ayudarte a poder comer y hablar.
- Radioterapia. Es posible que se necesite radioterapia con rayos de energía de alta potencia luego de una cirugía o si la cirugía no es una opción.
- Prótesis. Los especialistas, llamados prostodoncistas, pueden hacer reemplazos artificiales de dientes faltantes u otras estructuras naturales dañadas en la boca.
- Atención médica de apoyo. Diversos especialistas pueden ayudarte a resolver los problemas para hablar, tragar y comer durante el tratamiento y después de él. Entre estos especialistas, se incluyen dietistas, terapeutas del habla y del lenguaje y fisioterapeutas.
Debido al riesgo de recurrencia después del tratamiento, las citas de seguimiento regulares y de por vida son importantes.
© 1998-2024 Fundación Mayo para la Educación y la Investigación Médicas (MFMER, por sus siglas en inglés). Todos los derechos reservados.
Terms of Use