Cafeína: ¿cómo afecta la presión arterial?

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La cafeína puede causar un aumento breve de la presión arterial, incluso si no tienes hipertensión arterial. La subida repentina de la presión arterial a corto plazo ocurre principalmente en personas que no toman cafeína con frecuencia, y no en las que sí lo hacen. No obstante, la respuesta de la presión arterial a la cafeína varía de una persona a otra.

No está claro por qué la cafeína causa un aumento breve de la presión arterial en algunas personas. Algunos investigadores piensan que la cafeína podría bloquear una hormona que ayuda a mantener las arterias ensanchadas. Otros piensan que hace que las glándulas suprarrenales liberen más adrenalina, lo que causa el aumento de la presión arterial. El estrés también podría influir.

Las personas que toman cafeína de manera regular desarrollan una tolerancia a la cafeína. Como resultado, la cafeína no tiene un efecto a largo plazo en la presión arterial y no está relacionada con un riesgo mayor de sufrir hipertensión arterial, también denominada hipertensión.

Si tienes hipertensión arterial, posiblemente no necesites limitar el consumo de cafeína, o dejarla por completo, si la bebes con regularidad. Consulta a tu profesional de atención médica para estar seguro.

Si no tienes hipertensión arterial, la Administración de Alimentos y Medicamentos de los Estados Unidos indica que 400 miligramos por día de cafeína son seguros para la mayoría de los adultos. Pero tus genes determinan cómo tu cuerpo descompone la cafeína. Es por eso que algunas personas pueden beber más de 400 mg por día y otras pueden beber menos antes de sufrir efectos secundarios. Entre estos efectos secundarios, se incluyen los siguientes:

• Insomnio.
• Acidez estomacal.
• Síntomas urinarios.
• Sensación de que el corazón late rápido, aletea o palpita fuerte, que también se conoce como palpitaciones.
• Ansiedad, en algunas personas.

Recuerda que la cantidad de cafeína en el café, en las bebidas energéticas y en otras bebidas varía según la marca y la forma de preparación de la bebida.

Para ver si la cafeína eleva tu presión arterial, contrólatela antes de tomar una taza de café u otra bebida con cafeína y vuelve a controlarla de 30 a 120 minutos después de tomarla. Si no bebes cafeína con regularidad y tu presión arterial aumenta de 5 a 10 puntos, es posible que seas sensible ante los efectos de la cafeína que elevan la presión arterial. Si planeas reducir el consumo, hazlo a lo largo de varios días a una semana para evitar dolores de cabeza por la abstinencia de cafeína.