Sangrado de implantación: ¿es común al principio del embarazo?
El sangrado de implantación es un síntoma común al principio del embarazo. Comprende por qué sucede.
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El sangrado de implantación se define como una pequeña cantidad de manchado o sangrado leve. Suele ocurrir de unos 10 a 14 días después de la concepción. El sangrado de implantación es común y no suele ser un signo de un problema.
Se piensa que el sangrado de implantación sucede cuando el óvulo fecundado se adhiere al revestimiento del útero. El sangrado de implantación suele ocurrir alrededor de la fecha en que esperarías tener la menstruación. Sin embargo, este sangrado es menos abundante que el sangrado de la menstruación.
Algunas personas no presentan sangrado de implantación y otras no lo notan. Algunas veces, el sangrado de implantación se confunde con un período poco abundante. Si esto ocurre, podrías no darte cuenta de que estás embarazada. Esto da lugar a errores cuando se determina la fecha probable de parto. Una ecografía fetal, que normalmente se hace durante el primer trimestre del embarazo, puede ayudar a determinar con precisión la fecha probable de parto.
El sangrado de implantación es poco abundante, desaparece solo y no requiere tratamiento. Si tienes un sangrado vaginal que te preocupa durante el embarazo, comunícate con el proveedor de atención médica.
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