Es un estado general de mala salud, que incluye una pérdida significativa de peso y de masa muscular.
La caquexia suele deberse a una enfermedad, como el cáncer, el sida, la insuficiencia cardíaca o la enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC) avanzada.
Además de la pérdida de peso, los síntomas incluyen falta de apetito, cansancio y pérdida de fuerza.
El tratamiento incluye recibir asesoramiento nutricional, ser más activo, tomar medicamentos para aumentar el apetito y tratar la enfermedad subyacente.