Cáncer de la vesícula biliar
Obtén más información sobre este cáncer que comienza en la vesícula biliar. Por lo general, el tratamiento incluye una cirugía. La quimioterapia y la radioterapia pueden ser opciones.
Perspectiva general
El cáncer de vesícula biliar es una proliferación de células que comienza en la vesícula biliar.
La vesícula biliar es un órgano pequeño con forma de pera que se encuentra en el lado derecho del abdomen, justo debajo del hígado. La vesícula biliar almacena un líquido, la bilis, que el hígado produce para digerir los alimentos.
El cáncer de vesícula biliar es poco frecuente. Las posibilidades de curación son buenas si el cáncer de vesícula biliar se detecta cuando es pequeño. Pero la mayoría de los tipos de cáncer de vesícula biliar se detectan cuando ya se expandieron más allá de la vesícula. En ese caso, el pronóstico, que es la posibilidad de sobrevivir, suele ser malo.
Es posible que el cáncer de vesícula biliar no se descubra hasta que esté avanzado porque a menudo no causa ningún síntoma. Cuando ocurren, los síntomas pueden parecerse a los de afecciones comunes. Además, la vesícula biliar está oculta en el interior del cuerpo. Esto facilita que el cáncer de vesícula biliar prolifere sin que se detecte.
Síntomas
El cáncer de vesícula biliar puede no presentar síntomas. Cuando se presentan los signos y síntomas, estos pueden comprender los siguientes:
- Dolor abdominal, mayormente en la parte superior derecha del abdomen.
- Distensión del estómago.
- Un tumor que se puede sentir debajo de la piel.
- Pérdida involuntaria de peso.
- Ictericia, que es el color amarillento en la parte blanca de los ojos y en la piel. El color amarillento en la piel puede ser más difícil de ver en las personas de piel negra o morena. La ictericia suele aparecer cuando el cáncer de vesícula biliar está muy avanzado.
Cuándo debes consultar a un médico
Pide una cita con un profesional de atención médica si tienes síntomas que te preocupan.
Causas
Las causas del cáncer de vesícula biliar no están claras.
Los profesionales de atención médica saben que el cáncer de vesícula biliar se origina cuando las células sanas de la vesícula manifiestan cambios en su ADN. El ADN de una célula contiene las instrucciones que le indican lo que debe hacer. En las células sanas, el ADN da las instrucciones para crecer y multiplicarse a un determinado ritmo. Las instrucciones les indican a las células que deben morir en un momento determinado.
En el caso de las células cancerosas, los cambios en el ADN hacen que las instrucciones sean diferentes. Los cambios les indican a las células cancerosas que produzcan muchas más células con rapidez. Las células cancerosas pueden seguir viviendo luego del momento en que deberían morir. Esto causa un exceso de células.
Las células cancerosas pueden formar un bulto que se conoce como tumor. El tumor puede aumentar de tamaño hasta invadir y destruir el tejido corporal sano. Con el tiempo, las células cancerosas pueden desprenderse y diseminarse a otras partes del cuerpo. Cuando el cáncer se disemina, se llama cáncer metastásico.
El cáncer de vesícula biliar comienza, en muchos casos, en las células glandulares que recubren su superficie interna. El cáncer de vesícula biliar que se origina en este tipo de células se conoce como adenocarcinoma. Este término se refiere a la manera en la que las células cancerosas aparecen cuando se observan con un microscopio.
Factores de riesgo
Los factores que pueden aumentar el riesgo de cáncer de vesícula biliar incluyen los siguientes:
- Sexo femenino. El cáncer de vesícula biliar es mucho más común en las mujeres que en los hombres. Los expertos creen que puede estar relacionado con la hormona estrógeno, que aumenta el riesgo de cálculos biliares. Las personas a las que se les asignó el sexo femenino al nacer suelen tener niveles más altos de estrógeno en el organismo que las personas a las que se les asignó el sexo masculino.
- Edad avanzada. El riesgo de presentar cáncer de vesícula biliar aumenta a medida que aumenta la edad. Es más común después de los 65 años. Sin embargo, puede ocurrir en niños.
- Antecedentes de cálculos biliares. El cáncer de vesícula biliar es más frecuente en personas que tienen o tuvieron cálculos biliares. Los cálculos biliares más grandes representan un mayor riesgo. Los cálculos biliares son comunes. Pero, incluso en personas con cálculos biliares, el cáncer de vesícula biliar es poco común.
- Otras afecciones de la vesícula biliar. Entre otras afecciones de la vesícula biliar que pueden aumentar el riesgo de presentar cáncer de vesícula biliar, se incluyen los pólipos, las infecciones y la hinchazón e irritación crónica, que se conoce como inflamación crónica.
- Inflamación de los conductos biliares. La colangitis esclerosante primaria causa la inflamación de los conductos que drenan la bilis de la vesícula biliar y el hígado. Esta afección aumenta el riesgo de desarrollar cáncer de vesícula biliar.
Los profesionales de atención médica aún no descubrieron formas de prevenir el cáncer de la vesícula biliar.
Diagnóstico
El diagnóstico de cáncer de la vesícula biliar puede comenzar con una conversación sobre tus síntomas. Un profesional de atención médica puede utilizar análisis de sangre para saber cómo funcionan los órganos y pruebas de diagnóstico por imágenes para buscar signos de cáncer en la vesícula biliar.
Análisis de sangre
Un análisis de sangre para verificar el funcionamiento del hígado puede ayudar a tu profesional de atención médica a descubrir qué está causando los síntomas.
Estudios por imágenes
También se pueden hacer estudios por imágenes para tomar fotografías de la vesícula biliar, como una ecografía, una tomografía computarizada o una resonancia magnética.
Conocer la extensión del cáncer de vesícula biliar
Una vez que el profesional de atención médica diagnostica el cáncer de vesícula biliar, el siguiente paso es determinar la extensión del cáncer. Esto se denomina establecer la etapa. La etapa del cáncer de vesícula biliar ayuda a determinar el pronóstico y las opciones de tratamiento.
Algunas de las pruebas y los procedimientos utilizados para diagnosticar el cáncer de vesícula son los siguientes:
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Pruebas para observar los conductos biliares. El profesional de atención médica podría sugerir procedimientos en los que se coloca tinte en los conductos biliares. Luego, una prueba por imágenes registra el recorrido del tinte. Estas pruebas pueden mostrar obstrucciones en los conductos biliares.
Algunas de estas pruebas pueden ser la colangiografía por resonancia magnética y colangiopancreatografía retrógrada endoscópica.
- Otras pruebas por imágenes. La mayoría de las personas que tienen cáncer de vesícula biliar se someterán a una serie de exploraciones para ver si el cáncer se extendió. Las exploraciones comunes incluyen una tomografía computarizada e imágenes por resonancia magnética del área del abdomen y del pecho.
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Cirugía exploratoria. Si la cirugía es una opción de tratamiento para ti, es posible que tu profesional atención médica te recomiende primero una cirugía para observar el interior del abdomen y ver si el cáncer de vesícula biliar se extendió.
En un procedimiento denominado laparoscopia, el cirujano hace una pequeña incisión en el abdomen e introduce una cámara diminuta. La cámara le permite al cirujano comprobar los órganos que rodean la vesícula en busca de signos de que el cáncer se extendió.
Tu equipo de atención médica utiliza estos procedimientos para determinar la etapa del cáncer. Las etapas del cáncer de vesícula biliar van del 0 al 4. En general, un número bajo significa que el cáncer es pequeño y es más posible que se pueda curar.
La etapa 1 del cáncer de la vesícula biliar significa que el cáncer solo se encuentra en la vesícula biliar. A medida que el cáncer se expande y también se encuentra fuera de la vesícula biliar, las etapas aumentan. La etapa 4 del cáncer de la vesícula biliar significa que el cáncer se extendió de la vesícula biliar y está presente en los órganos cercanos. La etapa 4 también puede significar que el cáncer se ha diseminado a otras partes del cuerpo.
Tratamiento
El tratamiento para el cáncer de vesícula biliar suele implicar una cirugía. La cirugía podría no ser posible si el cáncer se diseminó a otros órganos cercanos. En su lugar, el tratamiento puede comenzar con radioterapia o medicamentos, como la quimioterapia. Cuáles son los mejores tratamientos para el cáncer de vesícula biliar para ti depende de la etapa del cáncer, de tu salud y de tus preferencias.
Cirugía
La cirugía se suele utilizar para tratar el cáncer de vesícula biliar que no se diseminó a otros órganos. Los tipos de cirugía incluyen los siguientes:
- Cirugía para extirpar la vesícula. Un cáncer de vesícula biliar que solo se encuentra en la vesícula se trata con una operación para extirpar este órgano. Esta operación es una colecistectomía.
- Cirugía para extirpar la vesícula biliar y una parte del hígado. El cáncer de vesícula biliar que se diseminó más allá de este órgano y que se encuentra en el hígado se trata mediante una cirugía para extirparla. Las partes del hígado y los conductos biliares que rodean la vesícula también se extirpan.
Si el cáncer de vesícula biliar es muy pequeño y se puede extirpar por completo en una colecistectomía, posiblemente, no necesites otros tratamientos.
Quimioterapia
La quimioterapia trata el cáncer con medicamentos fuertes. La mayoría se administra por vía intravenosa. Otros vienen en comprimidos.
El profesional de atención médica puede sugerir la quimioterapia después de la cirugía si existe el riesgo de que queden células cancerosas en la vesícula biliar. A veces, los profesionales de atención médica administran quimioterapia antes de la cirugía. También se puede usar para controlar el cáncer si no es posible realizar la cirugía.
Radioterapia
La radioterapia trata el cáncer con haces de energía potente. La energía puede provenir de rayos X, protones u otras fuentes.
La radioterapia a veces se combina con la quimioterapia después de la cirugía para el cáncer de vesícula biliar si el cáncer no se pudo eliminar. La radioterapia también puede controlar el cáncer de vesícula biliar que causa dolor e ictericia si no es posible realizar la cirugía.
Terapia dirigida
La terapia dirigida contra el cáncer es un tratamiento que utiliza medicamentos que atacan ciertas sustancias químicas dentro de las células cancerosas. Mediante el bloqueo de estas sustancias químicas, los tratamientos dirigidos pueden destruir las células cancerosas.
Los medicamentos de terapia dirigida se usan solamente en personas cuyas células cancerosas tienen ciertos cambios a los que puede apuntarse. Las células cancerosas pueden ser analizadas para ver si la terapia dirigida puede ayudarte.
Inmunoterapia
La inmunoterapia para el cáncer es un tratamiento con medicamentos que ayuda al sistema inmunitario a destruir las células cancerosas. Para combatir las enfermedades, el sistema inmunitario ataca los gérmenes y otras células que no deberían estar en el cuerpo. Las células cancerosas sobreviven porque se esconden del sistema inmunitario. La inmunoterapia ayuda al sistema inmunitario a encontrar y destruir las células cancerosas.
La inmunoterapia suele usarse para los tipos de cáncer de vesícula biliar que adquieren gran tamaño o se diseminan a otras partes del cuerpo.
Estrategias de afrontamiento, y apoyo
Aprender a afrontar una enfermedad potencialmente mortal, como el cáncer de vesícula biliar, llevará tiempo. Algunas ideas para aprender a enfrentar el cáncer de vesícula biliar son las siguientes:
Haz preguntas sobre el cáncer de vesícula biliar
Anota las preguntas que tengas acerca de tu cáncer. Haz estas preguntas en tu próxima cita médica. También puedes pedirle al equipo de atención médica algunos recursos de buena calidad de donde puedas obtener más información.
Informarte sobre el cáncer de vesícula y las opciones de tratamiento puede ayudarte a tomar decisiones sobre tu atención médica.
Mantente cerca de tus familiares y amigos
El diagnóstico de cáncer puede también ser estresante para tus familiares y amigos. Intenta que sigan siendo parte de tu vida.
Tus familiares y amigos posiblemente preguntarán si hay algo que puedan hacer por ti. Piensa en algunas tareas con las que podrías necesitar ayuda, como el cuidado de tu hogar si tienes que permanecer en el hospital o solamente estar presentes cuando quieras charlar.
Puedes encontrar consuelo en el apoyo de un grupo de familiares y amigos que te cuiden.
Busca a alguien con quien hablar
Busca a alguien con quien puedas hablar y que tenga experiencia con personas que presentan enfermedades que ponen en riesgo la vida. Consulta con un asesor, trabajador social médico o un miembro del clero. También puedes unirte a un grupo de apoyo para personas con cáncer. Pídele a tu equipo de atención médica que te conecten con estos recursos.
Escribe tu voluntad en cuanto a la atención médica
Toma medidas para asegurarte de que tu voluntad se conozca y se cumpla. Pregúntale a tu equipo de atención médica sobre directrices médicas anticipadas. Las directrices anticipadas te permiten establecer qué tipos de tratamientos desearías en caso de que no puedas expresar tus deseos.
También pregúntales acerca de nombrar un poder notarial médico. Esta es la persona que escoges para que tome las decisiones por ti en caso de que no puedas tomarlas por ti mismo.
Preparación antes de la cita
Para comenzar, programa una cita con un profesional de atención médica si tienes algún síntoma que te preocupa.
Si tu profesional de atención médica piensa que puedes tener cáncer de vesícula biliar, es posible que te remita a un especialista, que puede ser uno de los siguientes:
- Un médico que se especializa en tratar afecciones digestivas, un gastroenterólogo.
- Un cirujano que realiza operaciones en el hígado o la vesícula.
- Un médico que se especializan en tratar el cáncer, un oncólogo.
A continuación, encontrarás información que ayudará a que te prepares para la cita médica.
Qué puedes hacer
- Ten en cuenta las restricciones previas a la cita médica. Cuando programes la cita, asegúrate de preguntar si hay algo que debes hacer con anticipación, como, por ejemplo, restringir tu dieta.
- Anota tus síntomas, incluso aquellos que no parezcan estar relacionados con el motivo por el que programaste la cita médica, y cuándo comenzaron.
- Anota información personal crucial, como situaciones de gran estrés o cambios recientes en tu vida.
- Haz una lista de todos los medicamentos, las vitaminas o los suplementos que tomes, junto con las dosis.
- Pídele a un familiar o amigo que te acompañe. Alguien que te acompañe puede ayudarte a recordar la información que recibes.
- Anota las preguntas que quieras hacerle al profesional de atención médica.
En el caso del cáncer de vesícula biliar, algunas de las preguntas básicas que puedes hacer incluyen las siguientes:
- ¿Mi cáncer de la vesícula biliar se expandió por fuera de este órgano?
- ¿Deberán hacerme más pruebas?
- ¿Cuáles son los tratamiento para mi cáncer de vesícula biliar?
- ¿Cuáles son los beneficios y los riesgos de cada tratamiento?
- ¿Existe alguna opción de tratamiento que sugiera más que las otras?
- ¿Debería consultar con un especialista?
- ¿Hay algún folleto u otro material impreso que pueda llevarme? ¿Qué sitios web me recomienda?
No dudes en hacer todas las preguntas que tengas.
Qué esperar del médico
Es probable que el equipo de atención médica te haga preguntas como las siguientes:
- ¿Tienes síntomas de forma constante, o aparecen y desaparecen?
- ¿Cuál es la gravedad de los síntomas?
- ¿Hay algo que parezca mejorar los síntomas?
- ¿Hay algo que parezca empeorar los síntomas?
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