Hipnosis

Perspectiva general

La hipnosis implica un cambio en el estado de la conciencia y un aumento de la relajación, lo que permite una mejor atención y concentración. También se conoce como hipnoterapia. La hipnosis suele hacerse con la guía de un proveedor de atención médica que utiliza repetición verbal e imágenes mentales. Durante la hipnosis, la mayoría de las personas se sienten tranquilas y relajadas. Por lo general, ayuda a que las personas estén más dispuestas a recibir sugerencias sobre los cambios en la conducta.

La hipnosis puede ayudarte a controlar las conductas que quieres cambiar y a lidiar mejor con la ansiedad o el dolor. Si bien estarás más dispuesto a recibir sugerencias durante la hipnosis, no perderás el control de tu conducta durante una sesión.

Por qué se debe hacer

La hipnosis puede ser una manera eficaz de lidiar con el estrés y la ansiedad. En particular, puede reducir el estrés y la ansiedad antes de un procedimiento médico, como una biopsia de mama.

La hipnosis también puede ser útil para lo siguiente:

• Control del dolor. La hipnosis puede ayudar con el dolor producto de quemaduras, cáncer, trabajo de parto, síndrome de colon irritable, fibromialgia, problemas de mandíbula, procedimientos dentales y dolores de cabeza.
• Sofocos. La hipnosis puede aliviar los sofocos que causa la menopausia.
• Cambios en la conducta. El uso de la hipnosis ha demostrado cierto nivel de eficacia para tratar problemas del sueño y el hábito de mojar la cama, fumar y comer en exceso.
• Efectos secundarios del tratamiento para el cáncer. La hipnosis se ha usado para aliviar los efectos secundarios de la quimioterapia y la radioterapia.
• Enfermedades de salud mental. La hipnosis puede ayudar a reducir la ansiedad relacionada con miedos y fobias.

Riesgos

La hipnosis que hace un proveedor de atención médica capacitado es un tratamiento médico seguro, complementario y alternativo. No obstante, ten en cuenta que tal vez no resulte segura para algunas personas que tienen enfermedades mentales graves.

Las reacciones dañinas a la hipnosis son poco frecuentes, pero pueden incluir lo siguiente:

• Mareos
• Dolor de cabeza
• Náuseas
• Somnolencia
• Ansiedad o sufrimiento emocional
• Problemas de sueño

Ten cuidado cuando alguien sugiera la hipnosis como una manera de resolver sucesos estresantes del pasado, ya que eso puede desencadenar una reacción emocional intensa.

Cómo prepararte

No necesitas una preparación especial para la hipnosis. Es una buena idea usar ropa cómoda para que te ayude a relajarte. Asegúrate de haber descansado lo suficiente. De esa manera, es menos probable que te duermas durante la sesión, ya que está pensada para ser relajante.

Elige un proveedor de atención médica que cuente con certificación para realizar la sesión de hipnosis. Pide una recomendación a alguien de tu confianza. Infórmate sobre cualquier proveedor de atención médica que estés considerando. Haz preguntas como las siguientes:

• ¿Tiene capacitación especializada en hipnosis?
• ¿Está matriculado en este estado como profesional en su especialidad?
• ¿Cuánta capacitación ha recibido en relación con la hipnosis? ¿En qué instituciones?
• ¿Hace cuánto que hace sesiones de hipnosis?
• ¿Cuáles son sus honorarios? ¿El seguro cubre sus servicios?

Lo que puedes esperar

Antes de comenzar, el proveedor de atención médica te explicará el proceso de hipnosis y revisará los objetivos de tu tratamiento. Después, por lo general, el proveedor de atención médica comenzará a hablar en un tono amable y tranquilo, y describirá imágenes que creen una sensación de relajación, seguridad y bienestar.

Una vez que estés en un estado de relajación y tranquilidad, el proveedor de atención médica te sugerirá formas de lograr tus objetivos. Pueden incluir, por ejemplo, formas de aliviar el dolor o de reducir los antojos de fumar. El proveedor de atención médica también puede ayudarte a visualizar imágenes mentales vívidas y significativas de ti mismo alcanzando tus objetivos.

Cuando termine la sesión, es posible que puedas salir de la hipnosis por tu cuenta. O bien, el proveedor de atención médica puede ayudarte a aumentar tu estado de alerta progresivamente y de manera tranquila.

Al contrario de lo que podrías ver en las películas o durante un acto de hipnotismo, las personas no pierden el control sobre su comportamiento durante la hipnosis. Por lo general, permanecen conscientes durante la sesión y recuerdan lo que sucede.

Con el tiempo, es posible que puedas practicar la autohipnosis. Durante la autohipnosis, se alcanza un estado de relajación y calma sin la guía de un proveedor de atención médica. Esta habilidad puede ser útil en muchas situaciones, como antes de una cirugía u otros procedimientos médicos.

Resultados

La hipnosis puede ser eficaz para ayudar a las personas a afrontar el dolor, el estrés y la ansiedad. Sin embargo, ten en cuenta que los proveedores de atención médica suelen sugerir otros tratamientos, como la terapia cognitivo conductual, para esas afecciones antes de la hipnosis o junto con ella. La hipnosis puede ser eficaz como parte de un plan de tratamiento más amplio para dejar de fumar o bajar de peso.

Sin embargo, no es adecuada para todo el mundo. No todas las personas son capaces de entrar en un estado de hipnosis que sea lo suficientemente profundo para que sea eficaz. En general, cuanto más rápida y fácilmente las personas alcanzan un estado de relajación y calma durante una sesión, más probabilidades hay de que se beneficien de la hipnosis.