Cirugía mínimamente invasiva
Infórmate más sobre la laparoscopia o las técnicas quirúrgicas robóticas, que pueden implicar menos dolor y una hospitalización más corta.
Perspectiva general
En una cirugía de invasión mínima, los cirujanos emplean diferentes métodos para operar en el cuerpo con menos daños que una cirugía abierta. En general, la cirugía de invasión mínima se asocia con menos dolor, una hospitalización más corta y menos complicaciones. La laparoscopia es una cirugía que se realiza a través de una o más incisiones, que son unos cortes pequeños, con sondas pequeñas y con cámaras e instrumentos quirúrgicos diminutos.
La laparoscopia fue uno de los primeros tipos de cirugía de invasión mínima. Otro tipo de cirugía de invasión mínima es la cirugía robótica. Proporciona una visión 3D amplificada del sitio de la cirugía y ayuda al cirujano a operar con precisión y control.
El avance continuo en la cirugía de invasión mínima hace que sea una buena opción para las personas con una gran variedad de afecciones. Si necesitas cirugía y piensas que podrían tratarte con este método, consulta con tu cirujano.
Tipos de cirugía mínimamente invasiva
Los cirujanos realizan muchas cirugías de invasión mínima en distintas partes del cuerpo, como las siguientes:
- Adrenalectomía, para extirpar una o ambas glándulas suprarrenales.
- Cirugía cerebral.
- Colectomía, para extirpar partes de un colon que no están sanas.
- Cirugía de vesícula, que también se conoce como colecistectomía, para aliviar el dolor que causan los cálculos biliares.
- Cirugía cardíaca.
- Reparación de hernia de hiato, que en ocasiones se la llama cirugía antirreflujo, para aliviar la enfermedad por reflujo gastroesofágico.
- Extirpación de riñón, también llamada nefrectomía.
- Trasplante de riñón.
- Cirugía de la columna vertebral.
- Esplenectomía, para extirpar el bazo.
La cirugía de invasión mínima también puede utilizarse para cirugías más generales, como las siguientes:
- Cirugía para el cáncer, por ejemplo, para destruir un tumor.
- Cirugía de colon y de recto.
- Cirugía endovascular, para tratar o para reparar un aneurisma.
- Cirugía gastroenterológica, que incluye el baipás gástrico.
- Cirugía ginecológica.
- Neurocirugía.
- Cirugía ortopédica.
- Otorrinolaringología (oídos, nariz y garganta) y cirugía de cabeza y de cuello.
- Cirugía torácica, como una cirugía toracoscópica asistida por video, para diagnosticar y tratar afecciones en el pecho.
- Cirugía urológica.
Por qué se debe hacer
La cirugía de invasión mínima apareció en la década de los ochenta como una manera segura de satisfacer las necesidades quirúrgicas de muchas personas. En los últimos 20 años, muchos cirujanos comenzaron a preferir este tipo de cirugía a la cirugía abierta o tradicional. Con mayor frecuencia, la cirugía abierta requiere de cortes más grandes y una hospitalización más prolongada.
Desde entonces, el uso de la cirugía de invasión mínima se expandió en gran medida en muchas áreas quirúrgicas, como en la cirugía de colon y de pulmón. Pregúntale a tu cirujano si la cirugía de invasión mínima sería una buena opción para ti.
Riesgos
En la cirugía de invasión mínima se realizan cortes quirúrgicos más pequeños, y generalmente es menos riesgosa que la cirugía abierta. Pero incluso en una cirugía de invasión mínima, existen riesgos de complicaciones con los medicamentos que te ponen en un estado similar al sueño durante la cirugía, como sangrado e infección.
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