Desgarro del labrum de la cadera
Los deportes como el fútbol, el fútbol americano y el golf pueden aumentar el riesgo de daño del anillo de cartílago que ayuda a amortiguar y estabilizar la articulación de la cadera.
Descripción general
Un desgarro del rodete acetabular (labrum) de la cadera afecta al anillo de cartílago que se encuentra en el borde exterior del acetábulo de la articulación de la cadera. Además de amortiguar la articulación de la cadera, el rodete acetabular (labrum) actúa como un sello o junta de goma que ayuda a sujetar bien la cabeza del fémur (que se encuentra en su extremo superior) dentro del acetábulo de la cadera.
Los atletas que participan en deportes como hockey sobre hielo, fútbol, fútbol americano, golf y ballet corren un mayor riesgo de desarrollar desgarros del rodete acetabular. Los problemas estructurales de la cadera también pueden producir un desgarro del rodete acetabular.
Síntomas
Muchos desgarros del rodete cotiloideo no causan signos ni síntomas. Sin embargo, algunas personas tienen uno o más de los siguientes:
- Dolor en la cadera o la ingle, que suele empeorar si la persona pasa mucho tiempo de pie, sentada, caminando o haciendo una actividad atlética
- Sensación de que la articulación de la cadera se traba o produce un chasquido o crujido
- Rigidez o amplitud de movimiento limitada en la articulación de la cadera
Cuándo consultar al médico
Busca atención médica si los síntomas empeoran o no mejoran en un período de seis semanas.
Causas
Un desgarro del rodete cotiloideo puede deberse a lo siguiente:
- Traumatismo. Las lesiones o la dislocación de la articulación de la cadera (que pueden producirse durante accidentes automovilísticos o en la práctica de deportes de contacto, como fútbol americano o hockey) pueden provocar un desgarro del rodete cotiloideo.
-
Problemas estructurales. Algunas personas nacen con problemas de cadera que pueden acelerar el desgaste natural de la articulación y con el tiempo provocar un desgarro del rodete cotiloideo. Esto puede incluir tener una cavidad que no alcanza a recubrir por completo la parte esférica del extremo superior del fémur (displasia) o una cavidad poco profunda, lo que puede generar una mayor presión sobre el rodete.
La presencia de hueso adicional en la cadera, lo que se llama pinzamiento femoroacetabular, también puede causar el pinzamiento del rodete, lo que puede generar un desgarro con el tiempo.
- Movimientos repetitivos. Las actividades deportivas y otras actividades físicas (como correr largas distancias, y los movimientos de torsión o giro repentinos y frecuentes en el golf o el sóftbol) pueden provocar un desgaste natural de la articulación hasta ocasionar el desgarro del rodete cotiloideo.
Factores de riesgo
Cualquier persona puede tener un desgarre del labrum acetabular, pero algunas afecciones y actividades aumentan el riesgo.
La gente con problemas anatómicos en la cadera, como pinzamiento, displasia o laxitud de los ligamentos, es más propensa a tener con el tiempo un desgarre del labrum acetabular.
Participar en algunas actividades que requieren movimientos repetitivos o giros puede aumentar el riesgo para un desgarre del labrum acetabular. Entre esas actividades están el ballet, el golf y la natación. Los deportes de contacto, como el fútbol americano y el hockey, también aumentan el riesgo para lesiones en la cadera, como un desgarre del labrum acetabular.
Complicaciones
Un desgarro del rodete cotiloideo puede aumentar las probabilidades de osteoartritis en esa articulación.
Prevención
Si los deportes que practicas te ponen mucha tensión en las caderas, acondiciona los músculos circundantes con ejercicios de fuerza y flexibilidad.
Diagnóstico
El proveedor de atención médica registrará tus molestias en tus antecedentes médicos. El examen físico probablemente consistirá en que muevas la pierna, especialmente la articulación de la cadera, en varias posiciones para comprobar si hay dolor y evaluar la amplitud de movimiento de la cadera. Además, el médico podría pedirte que camines.
Exploraciones de diagnóstico por imágenes
El desgarro del rodete cotiloideo no suele suceder por sí solo. En la mayoría de los casos, otras estructuras dentro de la articulación de la cadera también tienen lesiones. Las radiografías son una excelente forma de visualizar los huesos. A través de ellas se pueden detectar artritis y problemas estructurales.
Una artrografía por resonancia magnética puede ofrecer imágenes detalladas de los tejidos blandos de la cadera. Una artrografía por resonancia magnética combina la tecnología de imágenes por resonancia magnética con un medio de contraste que se inyecta en el espacio de la articulación de la cadera para ver mejor el desgarro del rodete cotiloideo.
Inyección de anestesia
El dolor en la cadera puede ser causado por problemas dentro de la articulación o fuera de ella. Tu proveedor de atención médica podría sugerir inyectar un anestésico en el espacio articular. Si esto alivia el dolor, es probable que el problema se encuentre dentro de la articulación de la cadera.
Tratamiento
El tratamiento depende de la gravedad de los síntomas. Algunas personas se recuperan en pocas semanas con tratamientos conservadores que incluyen descansar y hacer actividades modificadas; otras necesitan una cirugía artroscópica para reparar la porción desgarrada del labrum.
Medicamentos
Los fármacos antiinflamatorios no esteroideos, como el ibuprofeno (Advil, Motrin IB, otros) y el naproxeno sódico (Aleve), pueden aliviar el dolor y reducir la inflamación. También es posible controlar temporalmente el dolor con una inyección de corticoesteroides en la articulación.
Terapia
Un fisioterapeuta puede enseñarte ejercicios para aumentar la amplitud de movimiento de la cadera, y desarrollar la fuerza y la estabilidad de la cadera y el torso. Los terapeutas también pueden enseñarte a evitar los movimientos que ejercen presión sobre la articulación de la cadera.
Cirugía y otros procedimientos
Si los tratamientos conservadores no alivian tus síntomas, tu proveedor de atención médica podría recomendar una cirugía artroscópica, en la que se inserta una cámara de fibra óptica e instrumentos quirúrgicos a través de pequeñas incisiones en la piel.
De acuerdo con la causa y la extensión del desgarro, el cirujano podría extirpar el trozo de labrum desgarrado o reparar el tejido desgarrado cosiéndolo de nuevo.
Las complicaciones de la cirugía pueden incluir infección, sangrado, lesión nerviosa y síntomas recurrentes si la reparación no se cura adecuadamente. Por lo general, debes esperar de 3 a 6 meses para volver a hacer deporte.
Preparación para la consulta
El proveedor de atención médica podría remitirte a un médico especialista en trastornos de la cadera o en medicina del deporte.
Lo que puedes hacer
Haz una lista que incluya lo siguiente:
- Descripciones detalladas de tus síntomas y cuándo comenzaron
- Otros problemas médicos que hayas tenido
- Actividades que pueden contribuir a tu dolor de cadera
- Todos los medicamentos, las vitaminas y otros suplementos alimentarios que tomas, incluidas las dosis
- Preguntas que puedes hacerle al proveedor de atención médica
Qué esperar de tu médico
Tu proveedor de atención médica podría hacerte las siguientes preguntas:
- ¿Exactamente dónde sientes el dolor?
- ¿Qué estabas haciendo cuando empezó?
- ¿Hay algo que mejore o empeore el dolor?
© 1998-2024 Fundación Mayo para la Educación y la Investigación Médicas (MFMER, por sus siglas en inglés). Todos los derechos reservados.
Terms of Use