Laxantes de venta libre para el estreñimiento: usarlos con cuidado

Si alguna vez has estado estreñido, es posible que hayas probado laxantes de venta libre. Varios factores pueden alterar los intestinos y causar estreñimiento. Entre ellos se encuentran la alimentación, la ingesta de líquidos, la actividad física y varios medicamentos.

Hay muchos tipos de laxantes disponibles sin receta médica. Puede que sean seguros y eficaces para tratar el estreñimiento de vez en cuando. Sin embargo, es muy importante leer atentamente la etiqueta y usarlos según las indicaciones. El uso excesivo de laxantes se ha relacionado con enfermedades serias. Además, puede que te vuelvas dependiente de ellos para defecar.

Llama de inmediato al equipo de atención médica si presentas estos síntomas:

• Dolores o calambres estomacales fuertes
• Cambios inexplicables en los patrones de defecación
• Diarrea intensa
• Heces con sangre o sangrado rectal
• Estreñimiento que dura más de siete días a pesar del uso de laxantes
• Debilidad o cansancio fuera de lo común
• Mareos.

Antes de probar con laxantes

La frecuencia de la defecación puede variar. Puede que a veces evacúes tres veces por día y otras veces, tres veces por semana. Si tienes menos deposiciones de lo habitual, quizás tengas estreñimiento. Además, el estreñimiento puede estar acompañado de heces duras, secas o pequeñas que son difíciles de evacuar.

Antes de probar con laxantes, prueba estos cambios en el estilo de vida que te ayudan con el estreñimiento:

• Consumir alimentos ricos en fibra. Entre ellos se incluyen el salvado de trigo, las frutas y las verduras frescas, y la avena. Un adulto promedio debe consumir entre 25 y 31 gramos de fibra por día.
• Beber mucho líquido a diario. Trata de beber entre 8 y 10 vasos de líquido sin cafeína y sin alcohol durante el día. Un vaso tiene 8 onzas (236 mililitros).
• Hacer ejercicio con regularidad.

Las mejoras en el estilo de vida alivian el estreñimiento en muchas personas. Pero, si los problemas persisten después de estos cambios, la siguiente opción puede ser un laxante suave.

Cómo alivian los laxantes el estreñimiento

Los laxantes funcionan de maneras diferentes. El funcionamiento de cada tipo varía de una persona a otra. En general, los suplementos de fibra son los más suaves para el cuerpo. También se conocen como laxantes que abultan las heces. Metamucil y Citrucel entran en esta categoría. Aquí hay algunos ejemplos de distintos laxantes. Aunque muchos laxantes se pueden adquirir sin receta médica, es mejor hablar con el equipo de atención médica primero. Ellos pueden ayudarte a decidir cuál es el laxante más seguro para ti.

Los laxantes orales pueden cambiar la manera en la que el cuerpo absorbe algunos medicamentos y nutrientes. Después de un uso prolongado, algunos pueden derivar en un desequilibrio electrolítico u otros problemas graves de salud. Entre los electrolitos se incluyen el calcio, el cloruro, el potasio, el magnesio y el sodio. Se encargan de regular una serie de funciones corporales. El desequilibrio electrolítico puede causar cambios en el ritmo cardíaco, debilidad, confusión y convulsiones.

Combinación de laxantes: Lee las etiquetas con cuidado

Algunos productos combinan diferentes tipos de laxantes, como un estimulante y un ablandador de heces. Sin embargo, los productos combinados no son necesariamente mejores que los de un solo ingrediente. Además, es más probable que causen efectos secundarios.

Un laxante de un solo ingrediente puede funcionarte mejor. Lee las etiquetas para asegurarte de que sabes lo que estás tomando y úsalo con cuidado.

Riesgos del uso de laxantes

• Interacción con otros medicamentos. Tus antecedentes médicos y los medicamentos que tomas pueden limitar tus posibilidades de tomar laxantes. Los laxantes pueden interactuar con muchos medicamentos, como algunos antibióticos y medicamentos para el corazón y los huesos. Lee las etiquetas atentamente. Si no sabes si un laxante en particular es seguro para ti, consulta al profesional de atención médica. Toma la dosis recomendada. No tomes más a menos que el médico te indique lo contrario.
• Complicación de otras afecciones. El uso de laxantes puede ser peligroso si la causa del estreñimiento es una afección grave. Esto podría ser una obstrucción intestinal.
• Dependencia. El uso de laxantes durante semanas o meses puede empeorar el estreñimiento. Esto sucede porque disminuyen la capacidad de contracción del colon.
• Precauciones para personas embarazadas y niños. No les des laxantes a los niños menores de 6 años sin la recomendación de un profesional de atención médica. Si hay un embarazo, consulta al equipo de atención médica antes de tomar laxantes. Los laxantes que abultan las heces y los ablandadores de heces suelen ser seguros durante el embarazo. Sin embargo, los estimulantes pueden ser perjudiciales.
• Precauciones para personas que están amamantando. Si has dado a luz recientemente, habla con un profesional de atención médica antes de usar laxantes. Aunque suelen ser seguros durante la lactancia, algunos ingredientes pueden pasar a la leche materna. Esto causa diarrea en los bebés lactantes.

Toma laxantes con precaución

El uso incorrecto de laxantes puede causar enfermedades graves. Si los necesitas para defecar, habla con el equipo de atención médica. Ellos te explicarán cómo dejarlos gradualmente. Esto debería restaurar la capacidad natural de contracción del colon.