Lo que se debe hacer y lo que no se debe hacer en una dieta baja en fibras

Definición

La fibra es la parte de las frutas, las verduras y los granos o cereales que el cuerpo no digiere. En una dieta con bajo contenido de fibra, se restringen estos alimentos de la dieta. Como resultado, hay menos material no digerido moviéndose por el intestino grueso y las heces son menos voluminosas.

Se puede recomendar una dieta con bajo contenido de fibra para diversas afecciones o situaciones. Esta dieta a veces se conoce como dieta restringida en fibra.

Objetivo

Entre los motivos por los que tu proveedor de atención médica puede indicarte una dieta con poca fibra se incluyen:

• Tienes un estrechamiento intestinal. Esto puede deberse a un tumor o una enfermedad inflamatoria, como la enfermedad de Crohn o colitis ulcerosa.
• Has tenido una cirugía intestinal.
• Estás recibiendo tratamiento, que daña o irrita tu tracto digestivo. Por ejemplo, la radiación puede causar irritación.

Las dietas con poca fibra suelen ser temporales. Transcurrido un breve periodo de tiempo, normalmente puedes ir incorporando poco a poco más fibra a tu dieta.

Detalles de la dieta

Una dieta baja en fibra limita los tipos de verduras, frutas y granos o cereales que puedes comer. Algunos de los alimentos que se permiten en una dieta con poca fibra son la leche, el queso, el yogur, la carne, el pescado y los huevos. Las personas intolerantes a la lactosa deben evitar la leche y los productos lácteos cuando causen dolor de estómago o diarrea.

La capacidad de digerir los alimentos varía de una persona a otra. Un proveedor de atención médica puede recomendarte una dieta más o menos limitada según las razones por las que la sigas.

Si sigues una dieta baja en fibra, asegúrate de leer las etiquetas de los alimentos. Algunos alimentos que quizás no esperes pueden contener fibra añadida. Por ejemplo, el yogur, el helado, los cereales e incluso algunas bebidas pueden contener fibra. Busca alimentos que no tengan más de 1 o 2 gramos de fibra por porción.

Evita los siguientes alimentos y los productos que los contengan:

• Frutos secos, semillas, frutas deshidratadas y coco.
• Granos o cereales integrales, palomitas, germen de trigo y salvado.
• Arroz integral, arroz silvestre, avena, granola, trigo triturado, quinua, bulgur y cebada.
• Frijoles (alubias, porotos) secos, frijoles entomatados, frijoles de lima, arvejas (guisantes, chícharos) y lentejas.
• Mantequilla de maní con trozos.
• Frutas y verduras, excepto las que se indican abajo.

Elige estos alimentos:

• Carne tierna, pescado y carne de aves, jamón, tocino, mariscos y fiambres.
• Huevo, tofu y mantequilla de maní cremosa.
• Productos lácteos, si los toleras.
• Arroz blanco y pasta.
• Productos horneados hechos con harina refinada de trigo o centeno, como pan, galletas, panqueques, gofres, bagels, galletas saladas y galletas integrales.
• Cereales fríos o calientes que tengan menos de 2 gramos de fibra alimentaria en una sola porción. A menudo, los cereales hechos a partir de cereales de arroz contienen muy poca fibra.
• Papas, zanahorias y habichuelas (judías verdes, vainas) en conserva o bien cocinadas.
• Salsa de tomate simple.
• Jugos de fruta y verdura.
• Plátano (banana), melón, puré de manzana y melocotón (durazno) (sin piel) en conserva.
• Mantequilla, margarina, aceites y aderezos para ensaladas sin semillas.

Un menú típico podría verse así:

Desayuno

• Copos de maíz con leche.
• Tostada de pan blanco, mantequilla de maní cremosa, jalea.
• Jugo de fruta.
• Café.

Refrigerio de media mañana

• Yogur sin semillas.
• Agua u otra bebida.

Almuerzo

• Sándwich de pavo con pan blanco y mayonesa.
• Sopa de tomate.
• Melocotón (durazno) en conserva.
• Leche u otra bebida.

Refrigerio de la tarde

• Lonchas de queso.
• Galletas saladas.
• Agua u otra bebida.

Cena

• Pescado al horno.
• Puré de papa con mantequilla.
• Zanahorias cocidas.
• Puré de manzana.
• Leche u otra bebida.

Prepara todos los alimentos para que estén tiernos. Algunos buenos métodos de cocción son hervir a fuego lento, escalfar, guisar, cocer al vapor y estofar. Hornear o calentar en el microondas en un plato cubierto es otra opción.

Es posible que tengas menos evacuaciones intestinales y heces más pequeñas con una dieta baja en fibra. Para evitar el estreñimiento, deberás beber más líquidos. Bebe mucha agua, a menos que tu proveedor de atención médica te indique lo contrario.

Resultados

Seguir una dieta con un bajo contenido de fibras limitará tus deposiciones. Puede ayudar a reducir la diarrea u otros síntomas, como el dolor de estómago. Después de un corto tiempo, es posible que puedas introducir otra vez la fibra en tu dieta.

Riesgos

Debido a que una dieta con poca fibra limita lo que puedes comer, puede ser difícil satisfacer tus necesidades nutricionales. Adopta una dieta con poca fibra solo durante el tiempo que te lo indique el proveedor de atención médica.

Si debes continuar con esta dieta durante más tiempo, consulta a un dietista diplomado, quien puede asegurarse de que satisfaces todas tus necesidades nutricionales.